Los barrios de El Regueral y El Piñeo son "los grandes olvidados por la administración". O, al menos, esa es la sensación que tienen sus vecinos. Los residentes denuncian que las "grandes necesidades de la zona no son atendidas por el Ayuntamiento" y que, cuando lo hacen, es "a la segunda o tercera petición". Entre las "numerosas carencias" que tienen ambas barriadas, los candasinos destacan deficiencias "en el estado del pavimento de la carretera", "la necesidad de construir una acera", "aumentar los puntos de luz" y "crear una red de saneamiento".

"Llevamos años pidiendo estas mejoras pero no encontramos solución. Parece que no van a arreglarlo hasta que no haya una desgracia", claman sobre una problemática que no sólo atañe a sus residentes, ya que la zona es frecuentada "por paseantes y atletas que entrenan en el polideportivo".

"El estado en el que se encuentra todo es lamentable. No hay aceras por las que transitar; la carretera se encuentra en mal estado; los coches pasan a alta velocidad y tampoco hay badenes que impidan este riesgo; los puntos de luz están muy alejados entre sí... No puede estar peor", lamenta Isabel Prendes, vecina de El Piñeo, quien asegura haber sufrido una auténtica odisea "para solicitar el recambio de una bombilla". "Tuve que ir hasta tres veces al Ayuntamiento hasta que logramos que la repusiesen", manifiesta.

Seguir el camino en dirección opuesta a Candás no hace mejorar el panorama. En El Regueral la situación es prácticamente idéntica. "El principal problema que tenemos aquí es la carretera. Si no la amplían para poder hacer una acera no podremos dar solución a el saneamiento ni a los puntos de luz. Lo principal es el vial", apunta otra vecina, que prefiere mantener su identidad en el anonimato. "De momento, no nos queda otra que seguir con las manos atadas".