"Está muy blando, mucho mejor que antes". Los jugadores de los equipos alevines del Romanón y el Atlético Siero tuvieron ayer el honor de estrenar el recién renovado césped del campo de El Bayu de la Pola. El Romanón A fue el encargado de inaugurar el nuevo terreno de juego en partido oficial, enfrentándose al equipo de Mareo. Y lo hizo con una victoria. Los jugadores se mostraron satisfechos tanto por el resultado como por las nuevas condiciones en las que van a jugar a partir de ahora. "Se nota mucho, te hundes más en el campo", confirmaba Iyán Menéndez al terminar el encuentro.

Los entendidos -que, como se sabe, en los campos de fútbol son casi todos- dicen que al terreno de juego todavía le falta un tiempo para estar en las mejores condiciones. Se necesita que asiente el caucho suelto con que se alimenta el césped y también un riego continuo antes de cada encuentro, pero, aun así, la diferencia con el césped que había hasta ahora es muy grande. Estaba en muy malas condiciones, y la comparación con el que hay ahora lo pone muy de manifiesto.

En la jornada de ayer coincidió, además, que dos equipos de la Pola se enfrentaban en la liga, con lo que ambos pudieron disfrutar de las nuevas instalaciones en estreno del terreno de juego. Fueron el Atlético Siero B y el Romanón C. La victoria fue para El Romanón.

Y todavía faltaba el partido de otro Romanón alevín, el B, que disputó su partido contra el Lenense, y cuyos jugadores se mostraron encantados con el nuevo césped. También los visitantes se quedaron admirados con el terreno de juego cuando se asomaron nada más llegar al campo. La victoria fue también en este caso para el equipo del Romanón. En cualquier caso, resultados aparte, el campo satisfizo a todo el mundo. Porque no solo fueron los partidos. A lo largo de la mañana, la zona en la que no se disputaron partidos se llenó de futbolistas espontáneos.