Los extrabajadores del Matadero Central de Asturias, en Noreña, quieren volver a trabajar, pero denuncian que las trabas y retrasos en los trámites por parte del Principado impiden que el grupo Panero pueda reabrir el macelo. La antigua plantilla de Junquera Bobes S. A., que perdieron sus puestos hace ya dos años y medio, lamentan que la administración regional no visite las instalaciones para hacer una evaluación de requisitos sanitarios imprescindibles para retomar la actividad y anuncian que retomarán las movilizaciones si los grupos políticos no cumplen su palabra de apoyar un proyecto que consideran "vital" para el sector primario asturiano.
Los exempleados recuerdan que todos los grupos de la Junta del Principado apoyaron el 18 de noviembre una resolución en la que se comprometían a agilizar los trámites y apoyar con los medios que fueran necesarios la reapertura de las instalaciones por el grupo Panero. "Si no cumplen su palabra, tendremos que movilizarnos", indicó el portavoz de los extrabajadores, Alberto González, durante una reunión celebrada ayer en las instalaciones del matadero entre la antigua plantilla y el empresario Luis Alberto Sánchez Panero.
González lamenta que el Principado "quiera exigir al Central lo que no se cumple en otros mataderos" y denunció la existencia de presiones por parte de los empresarios de otros macelos para que el de Noreña no recupere su actividad. "Si siguen las demoras denunciaremos las deficiencias existentes en otros mataderos de Asturias", amenazaron los trabajadores, muy descontentos con la falta de compromiso del Principado. "En este caso la empresa ha hecho todo, pero lleva desde el 23 de febrero esperando que Sanidad mueva ficha", recordó.
A este respecto, el propio Panero aseguró que las demoras ponen en peligro varios contratos que permitirían al Matadero recuperar el sacrificio de ganado vacuno e incluso incorporar el de ganado porcino. "Tenemos el pájaro en la mano y sería lamentable que lo viéramos escapar", dijo Panero sobre unos acuerdos que precisan tener las instalaciones listas en mayo. "Estamos hablando de contratos muy potentes y todos los días sigue llamando gente para interesarse por nuestros servicios", apuntó el empresario sierense.
