Las cámaras de videovigilancia instaladas en el complejo deportivas de La Mata, en Candás, consiguen ahuyentar a los ladrones, que en los últimos tiempos se han cebado con el cableado. Tras su instalación, no se ha registrado ningún robo ni en el campo de hierba artificial ni en La Mata, todo ello teniendo en cuenta que durante el último trimestre del año, los cacos se cebaron con esta zona. Las sustracciones supusieron un desembolso municipal de más de seis mil euros. "En los próximos días colocaremos también nueva iluminación para mejorar la seguridad de las instalaciones", apuntó el concejal de Urbanismo, Gabriel Rodríguez.
Los tres robos registrados desde octubre de 2016, uno por mes hasta diciembre del pasado años, fueron de similares características. En todas ellas robaron cableado eléctrico. La mayor de las sustracciones fue en octubre, cuando los cacos dejaron sin luz el campo de hierba sintética y parte de La Mata, donde vio afectada una torreta de alumbrado. Esa "broma" costó 4.000 euros a las arcas municipales. En noviembre, los ladrones repitieron en la misma zona y sustrajeron un cable de 235 metros que su reposición tuvo un coste de unos 1.000 euros. Ese robo conllevó la anulación de otra torreta de iluminación de La Mata. Y también motivó al Ayuntamiento para agilizar la instalación de las cámaras que abarcan todo el perímetro de las instalaciones deportivas desde el acceso al campo de césped artificial, entre otras zonas. Los dispositivos tardaron en ponerse en funcionamiento y eso provocó que los cacos volvieron a actuar por última vez el pasado 18 de diciembre. En esa última ocasión, los ladrones sustrajeron 200 metros, lo que supone un gasto de unos 1.000 euros, y levantaron unas arquetas que estaban selladas con cemento y dan servicio al campo sintético anexo a La Mata.
