Mirielly Querales se apuntó al curso "Formación para el inicio de la empresa", organizado por la Escuela de Emprendedoras y Empresarias del Principado, "sin ninguna idea de negocio". Pero lo ha finalizado con una empresa en mente, Sinergia. Es una consultora dedicada a potenciar el talento humano.

Es sólo un ejemplo. "Cuando llegué aquí pretendía comprar una furgoneta para ir a domicilio" por los concejos del oriente asturiano, confesó Lucía Noval. Pero sus compañeras de curso la animaron a cambiar de idea y plantearse la puesta en marcha de un centro de terapia ocupacional y fisioterapia.

Las ideas de negocio de las participantes en este curso son diversas. Natalia Álvarez tiene en mente un taller artesanal de cuero, que sea un espacio abierto al público, donde puedan ver los artículos, modelos y materia prima, además de proponer ideas. Prevé impartir talleres y canalizar la venta por internet.

La propuesta de Covadonga Villar fue la más dulce. Se llama Azúcar de Caña y surge de su "deseo de ser económicamente independiente". Es una empresa dedicada a la distribución de golosinas pensando, sobre todo, en los adultos, que son los más olvidados en este sector. Quiere montar una tienda online para vender tartas, centros y packs de regalo realizados con golosinas y chocolates, en los que se cuida con esmero la presentación. También ofrece mesas dulces para eventos, con las chuches como protagonistas y un "cuidadoso acabado".

Alicia Lagranda apuesta por un negocio de costura creativa y una línea propia de moda y complementos. Pretende tener una tienda con taller, en el que también se impartan clases. Silvia Prieto, que elabora y diseña juguetes tradicionales de forma artesanal, desea disponer de un local e impartir clases de malabares para niños. Paula Prieto, por su parte, quiere poner en marcha una agencia de eventos y comunicación.

La directora del del Instituto Asturiano de la Mujer y Políticas de Juventud, Almudena Cueto, que entregó los diplomas del curso junto con las ediles Noelia Macías y Natividad Álvarez, las animó y recomendó tener "muchísima paciencia y optimizar recursos".