El gobierno de Siero prevé actualizar la ordenanza que regula la actividad del mercado de frutas y verduras de los martes en la Pola, como pide Somos. Es un referente en la región y así lo destaca el concejal del área, César Díaz (PSOE): "Los mercados de Grado y Siero son de los más importantes de Asturias, pero hay que poner orden para que no se cuele todo".
La normativa se ha quedado desfasada, admiten los políticos municipales. Como explica el edil de Somos, Javier Pintado, cuando se gestó eran otros tiempos en los que la gente de las aldeas llegaba con los excedentes de la huerta y con el dinero que sacaba aprovechaban para comprar en la Pola otros productos que no producía. Era una economía de subsistencia.
Pero es obvio que no todos los productos que actualmente se venden en la plaza proceden de los excedentes de la huerta, porque la economía rural ha cambiado y las nuevas formas de vida, más profesionalizadas, piden paso. Es una forma también de potenciar este mercado. César Díaz cree que hay que debatir y llegar a un consenso sobre si ha de ser sólo una venta de excedentes de la huerta, pues para él tienen que seguir siendo para "el paisanín y paisanina de la aldea de Siero".
Pero, por ejemplo, Somos defiende que el mercado de la Pola "sirva de vía de distribución para la gente que vive de la huerta y vende directamente los productos". Argumentan que es una forma de que "los jóvenes puedan vivir en el campo y fijar población en la zona rural".
La ordenanza actual, que aún fija las multas en pesetas, considera que son ventas ambulantes extraordinarias las de productos agrícolas excedentes por los propios productores. Aunque matiza que, como criterio general, se autoriza discrecionalmente dadas las características del concejo y los intereses de los comerciantes con establecimiento permanente abierto. Hay quejas porque hay quien pone a la venta productos que ha comprado y no ha producido en su huerta. Es evidente cuando se ofrecen aquellos que no son de temporada y que en ese momento no produce la huerta asturiana. De ahí que Díaz recalque la idea de poner orden para que "no se cuele todo".
Otro punto que genera controversia es si los vendedores han de ser únicamente de Siero o pueden asistir de los municipios próximos. El concejal de Mercados, César Díaz, apuesta porque se circunscriba sólo al concejo, pues insiste en que ha de ser para "el paisanín y la paisanina de las aldeas de Siero". Somos, que defiende que el mercado sea una apuesta por el comercio de cercanía, quiere que también participen productores de fuera, como ya ocurre. Piden seguir potenciando este mercado y completarlo con otros de segunda mano, de productos ecológicos y estacionales: "Todos los grupos somos conscientes de que necesitamos una ordenanza que se pueda cumplir porque de aplicarla acabaríamos con el mercado".
