"Esperamos que salga todo muy bien y que la gente acuda a disfrutar del Miserere, bien para cantar o como público. Debería ser así en reconocimiento y memoria de Luis García Valdés". Antonio de Luis Solar, exalcalde de Pravia, recoge la batuta dejada por el músico García Valdés tras su fallecimiento, y da un paso al frente para dirigir el coro que dará voz a uno de los momentos más emotivos y tradicionales de la Pasión praviana. Tendrá lugar en la Colegiata el Viernes Santo, tras la procesión del Desenclavo (20.30 horas).

Con conocimientos musicales tras haber cursado estudios de canto y saxofón, De Luis asume con naturalidad el legado que García Valdés le dejó en vida. "Empecé a cantar el Miserere de muy joven. Tenía muy buena relación y mucho aprecio por Luis, y ya le ayudaba en los ensayos. En su día me había comentado que, tras su muerte, me tocaría a mí dirigir, y aquí estoy", recuerda el nuevo director, que ya ha convocado cinco ensayos.

Una de las principales preocupaciones que tenía García Valdés era la supervivencia de la recuperada tradición del Miserere. El músico praviano siempre había animado a los más jóvenes a sumarse al canto, algo que parece haberse conseguido este año. "Contamos con casi diez voces de menos de 50 años y alguno menor de 30", destaca De Luis, quien considera primordial la incorporación de savia nueva a la coral popular: "Las voces estaban envejeciendo y, desafortunadamente, alguno nos dejó. Por eso es bueno que se incorporen jóvenes", enfatiza el exalcalde, que en todo momento anima a los vecinos a participar: "Los que hayan cantado el Miserere alguna vez pueden incorporarse sin problema, y los que no, estaríamos encantados de que nos acompañen".