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Los mil frixuelos de Agones

"Nos los quitan de las manos", dicen las amas de casa que preparan los dulces que se repartirán en la carrera popular de la localidad praviana

Se los quitan de las manos y por eso este año doblarán esfuerzos. La Asociación de Amas de Casa "San Bartuelo" de Agones (Pravia) se prepara para repartir hoy mil frixuelos entre los participantes de la cuarta edición de la carrera popular "Los 8 kilómetros de Agones" que ha pasado a llamarse "Los 8 kilómetros del frixuelo" tras el éxito de las amas de casa. En total, mil frixuelos y veinte tortillas españolas que servirán a los corredores para reponer fuerzas tras la competición, a las 18.30 horas.

"El año pasado nos los quitaban de las manos", comenta Olga Pire, a lo que Charo González añade: "Destapaban las fuentes para comerlos, fue exagerado". Por eso ya tienen preparadas quince cazuelas con la masa del dulce y temen quedarse cortas. "Hay que mirar lo que va saliendo de cada una para echar cuentas y ver si hay que hacer más", señala Mari Álvarez.

Huevo, leche, harina y un añadido secreto que no quieren revelar son los ingredientes de sus ya famosos frixuelos, que preparan en cada festividad de la parroquia desde hace 21 años. "Tenemos un secreto pero no lo damos, siempre nos dicen que no comieron nunca unos frixuelos tan buenos", afirma Álvarez. Y para las tortillas tienen ya listos 25 kilos de patata y 50 docenas de huevos, siete por cada tortilla. "La patata fritina, ni muy hecha la tortilla ni poco para que guste a todos", precisa Pire.

El trabajo fuerte comenzará hoy a las nueve de la mañana. "Estamos muy organizadas, no tropezamos porque cada una sabe el trabajo que tiene que hacer", explica Virginia Menéndez. Así, ella y Pire se encargan de preparar la masa de los frixuelos y de cortar patatas y batir huevos. Por su parte, González y Álvarez están en los fogones con las frituras.

Lo cierto es que, aunque se les presenta por delante una jornada de duro trabajo en la que sólo pararán para almorzar, tienen muchas ganas de que todo salga bien y los corredores se marchen contentos del pueblo. "Tenemos mucha ilusión", apostilla González. "Trabajamos contentas y lo hacemos por el pueblo y para que la gente se lo pase bien", añade Menéndez. Además, dicen que los participantes "más atentos no pueden ser".

Los más de trescientos corredores tendrán una buena recompensa tras los ocho kilómetros de recorrido, tortilla española y dos frixuelos por cabeza. Como mínimo. "Serán algunos más", concluyen las amas de casa.

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