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Cabranes vende por 300.000 euros la casa señorial de los Riego, un "túnel del tiempo"

"Está todo intacto, tal cual se hizo en el siglo XVIII", dice su dueño, que se deshace del inmueble al no poder mantenerlo

Pedro Manuel del Riego, en la entrada. M. N. MORO

La casa señorial de los Riego en Fresnedo, Cabranes, uno de los edificios civiles con más valor patrimonial del municipio, se ha puesto a la venta por 300.000 euros. Su propietario, Pedro Manuel del Riego, ha decidido venderla para garantizar su mantenimiento.

El heredero de la propiedad, que data del siglo XVIII, reside en Murcia, y asegura que le es imposible mantener la casa como es debido. Aun así, todos los años acude al menos dos veces para apuntalar, retejar y evitar su deterioro lo más posible. Porque el inmueble está deshabitado desde hace cien años. La casa lleva sin habitar cien años. Esto hace que se haya conservado en un estado difícil de ver en otras propiedades.

"Está todo intacto tal cual se hizo en el siglo XVIII", asegura el propietario. La casa está hecha toda de roble por dentro, con muros de más de un metro de ancho. La buena calidad de los materiales hace que se haya conservado en bastante buen estado. "Es como entrar en un galeón antiguo", asegura del Riego.

"Lo bonito de la casa es que entras y la recorres como en un túnel del tiempo. Es mágica en ese sentido, entras en una casa del siglo dieciocho" señala el propietario.

Tanto las estancias como los servicios están como estaban entonces. Por ejemplo, el cuarto de baño es el que había en el siglo dieciocho, y conserva un solo grifo que se puso hace cien años en la cocina.

Entre sus valores está, además, la conservación de un escudo antiguo de la familia que data de finales del siglo XV, y que se recuperó de otra construcción de aquella época hoy casi desaparecida.

"Desgraciadamente, no puedo atender la casa, porque mi vida está en Murcia", dice el propietario, que espera que otras personas sí puedan hacerlo y contribuyan a conservar un inmueble de tanto valor histórico.

Su buena conservación lo hace susceptible de recibir ayudas a la rehabilitación del Principado.

En todo caso, la idea es que el edificio recupere su esplendor como una de las joyas históricas de la arquitectura de Cabranes.

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