Se llama "Estilo Villaviciosa" porque el concejo es la zona de Asturias en la que mayor abundancia de hórreos con una tipología común, la más antigua de las descritas, tiene en Asturias. Y protagoniza, además del estudio realizado por Armando Graña y Joacu López (director del Museo del Pueblu d'Asturies) la visita que la Fundación José Cardín Fernández organiza los sábados del mes de julio a bordo de su "Bus Etnográfico".

Graña y López han descrito tres estilos principales: el "Villaviciosa" (el primero que abordaron), el "Estilo Carreño" y el "Estilo Allande". El maliayés está ubicado entre los siglos XV y XVII, aproximadamente, y se extiende por el territorio central de Asturias, la cuenca del Nalón, la comarca de la Sidra y algún concejo del Oriente, como Piloña. Se ve, además, en concejos como Trubia, Aller, Quirós y Teverga. Esta es una información que la guía de la fundación, Rebeca Meana, facilita durante la visita.

"El 'Estilo Villaviciosa' se caracteriza por una decoración principalmente tallada que se centra en los liños, colondras y sobreliños", enumera, antes de explicar en qué consiste cada parte de la construcción mueble. "Las colondras son las maderas que hacen la caja del hórreo; los liños son las vigas que se ubican justo encima de esa caja, entre el tejado y la pared, y los sobreliños son la pequeña estructura de madera que está justo encima de los liños", apunta.

En cuanto a los motivos tallados dentro de este estilo, suelen ser geométricos: rosetas hexapétalas, tallas de cordón, dientes de sierra, espina de pez y arquillos abocinados sobre las puertas son algunos de los ejemplos que se pueden ver en el concejo. El "Bus Etnográfico", que la Fundación José Cardín Fernández desarrolla junto a la Casa'l Horru de Sietes, detiene su marcha en la parroquia de Fuentes, donde destaca el hórreo de Muslera, "uno de los más significativos". No está fechado, pero su datación oscila, al igual que la aparición del "Estilo Villaviciosa", entre los siglos XV y XVI.

Un poco más adelante, en la misma parroquia, la parada es en el hórreo de La Piquera, y a continuación el autobús dirige su camino hacia Sietes. Allí, Isidoro Granja Coya, responsable de la Casa'l Horru, muestra a los visitantes uno de los barrios de la localidad más poblados por los hórreos, el de Perviyao. Conocen, asimismo, la Casa'l Horru y visitan todo el conjunto etnográfico, además de la plaza de Sietes. El autobús tuvo una excelente acogida el verano pasado, un éxito que está repitiendo desde que el día uno se realizó la primera salida. Por este motivo, la fundación se está planteando "organizar para el año que viene un campo de trabajo para poder estudiar los hórreos del 'Estilo Villaviciosa'", avanzó Meana. El objetivo de esta actividad es "dar a conocer" el patrimonio etnográfico de los hórreos en Villaviciosa a personas tanto de Asturias como de otras comunidades.

Los primeros "no se fijan" en una estructura tan singular porque "ya es tan común que no la ven", y para los segundos también suele pasar desapercibida hasta que caen en la pericia arquitectónica de una construcción de madera del siglo XV que aún sigue en pie. "Hay gente de aquí que ahora ve los hórreos de otra manera y gente de fuera que se va maravillada", añade la guía.