"No tengo absolutamente nada que ocultar y todos mis bienes están declarados en Hacienda de forma puntual y transparente". Así de contundente se mostró ayer el alcalde de Siero, el socialista Ángel García, que se decidió a hablar después de llevar días callado. Habló para dar explicaciones sobre el chaparrón que le está cayendo encima desde que trascendió públicamente que la comisión de ética de la Federación Socialista Asturiana (FSA) investigaba sus declaraciones de bienes e ingresos -ahora ha sido desviado el expediente a la dirección federal sanchista en Madrid-, pues hay un baile de cifras entre la que presentó al finalizar el mandato 2011-2015 como edil y cuando asumió el cargo de Alcalde. Entonces, grupos de la oposición como Somos e IU ya lo advirtieron.

García reconoce que ganó 400.000 euros en 9 años por rendimiento de trabajo y capital, "lo que deja claro mi capacidad financiera", esgrimió, a la vez que precisó que lleva 25 años trabajando y sólo dos como regidor. También quiso dejar claro que no tiene cuentas en paraísos fiscales ni se ha acogido a ninguna amnistía fiscal o le han sometido a una inspección de Hacienda.

Ángel García argumenta que como consecuencia de un cambio en su patrimonio al comprar una parcela urbana en Viella (Siero) en 2016 él mismo -insistió- fue quien se dio cuenta de que había errores en su declaración de bienes e ingresos que constaba en el Ayuntamiento. "Soy yo quien corrige los datos porque no coinciden con lo que declaré en Hacienda", remarcó ayer, arropado por compañeros de partido y gobierno. La corrección fue en febrero de 2016.

La comisión autonómica de ética de la FSA trasladó la investigación del patrimonio del alcalde a la Comisión Federal de Ética y Garantías, en Madrid, después de las críticas que le han llovido, principalmente de los socialistas de Siero, al ponerse en cuestión su trabajo al filtrarse que se había iniciado este proceso interno sin haber resultados concluyentes. Mañana mismo Ángel García viajará a Madrid para entregar en la calle Ferraz toda la documentación que le reclaman para zanjar de una vez por todas este asunto.

"Voy a hacer copia de los documentos de escrituras, rentas y lo que necesiten para que puedan comprobar que no hay nada extraño", afirmó. "Tengo plena confianza en los que están aquí", agregó sin querer entrar en más polémicas con la FSA. "Cada uno sabrá lo que hizo. A mí no me preocupa", se limitó a decir. No obstante, el malestar con la dirección regional del partido es palpable entre los militantes socialistas que ayer arroparon a Ángel García con su apoyo y presencia en la comparecencia en la Casa del Pueblo de Lugones. "Me siento respaldado por quienes a mí me interesan", apuntó. Pero la militancia socialista de Siero cree que "se está actuando de mala fe" por haber trascendido este proceso interno del partido.

No es la primera vez que saltan chispas con la ejecutiva de la FSA. Más desde que el PSOE de Siero apoyara en las primarias nacionales la candidatura de Pedro Sánchez a la Secretaría General del partido y ahora se muestren afines a Adrián Barbón en las regionales. Además, García no se ha cortado en criticar o reclamar cuestiones importantes para Siero al Gobierno regional. "Tengo clara mi posición política y hoy más que hace una semana. Poder decir lo que uno piensa es importante", afirmó. Y matizó: "Desde la prudencia. En la política no vale todo". Reclamó, además, respeto "a la presunción de inocencia porque flaco favor hacemos al partido y a la sociedad".

Y remató su comparecencia pública con la misma frase que empezó: "No tengo nada que ocultar".