Buena parte de la mejor manzana asturiana de la "cosechona" de este año acabará hecha zumo en una fábrica de Lérida, ante la imposibilidad de los cosecheros de colocar el producto en los lagares regionales. Unas 25 toneladas de fruta de la cooperativa Campoastur (miembros de la antigua Aacomasi), marcaron ayer un hito con el envío a Lérida del que, según fuentes de la entidad, es el primer cargamento de manzana asturiana que va destino de una planta de procesados.
El camión partió de Sebrayu (Villaviciosa), en un simbólico viaje que deja en los propietarios de las pomaradas una sensación agridulce en la que se mezcla la satisfacción por dar salida a los excedentes y la tristeza por no haber conseguido que todo ese producto se procese en el Principado para convertirlo en bebida regional. Fuentes de los cosecheros señalaron ayer a este diario que la operación de ayer "lanza un mensaje contraproducente para un sector pujante y emblemático que debe generar riqueza en Asturias y puestos de trabajo en el campo asturiano, apostando por la calidad y el producto asturiano".
Indican que no sobra manzana autóctona con motivo de la "cosechona". "Eso no es cierto, lo que sobra es la manzana que viene de fuera", matizan. Tampoco reconocen un exceso de plantaciones. "Hace falta casi el doble de lo existente para abastecer el mercado", aseguran. Los cosecheros advierten de que si no se soluciona el problema "el cultivo del manzano de sidra en Asturias dejará de ser una alternativa viable para el campo". La solución, para los plantadores, está en manos de todos los asturianos. "En Asturias y fuera se tiene que consumir sidra con denominación de origen, 30 o 50 céntimos más cara, pero es la única sidra que garantiza el empleo de un 100% de materia prima regional". Los cosecheros están dispuestos a seguir negociando con los llagares asturianos para intentar vender la manzana hasta el fin de la recolección y reconocen el esfuerzo de las bodegas para adquirir la producción.
