"Estamos ejerciendo el único derecho que parece que nos queda, el de pataleo". Los extrabajadores de Procoin se concentraron ayer frente a las instalaciones de la empresa, en el polígono de Silvota, "para pedir el cobro de las cinco nóminas y media" que les adeuda la compañía. Los exempleados, que llegaron a finales del mes pasado a un acuerdo con el administración concursal para rescindir sus contratos, exigen a los propietarios de la firma "que cumplan con su palabra y paguen".

"Esto es muy duro. Llevamos cuatro meses y medio sin cobrar, y se nos deben cinco nóminas y media -también se les adeuda la paga extra de diciembre- y sólo pedimos lo que es nuestro. La empresa dijo en todo momento que su prioridad iba a ser pagarnos y, hasta ahora, se ha visto que no es así. A ver si con estas protestas se les pone la cara colorada y pagan", denuncia Emilio González, presidente del comité de empresa.

Los ahora extrabajadores de la firma radicada en Llanera acordaron a finales de enero la rescisión de sus contratos, un pacto en el que lograron acordar el pago de 23 días por año trabajado -en vez de 20- con el administrador concursal, que ya ha sido aprobado por el juez. "Ahora, al menos, podremos percibir el subsidio de desempleo o buscar un nuevo trabajo", suspira González, quien advierte que planean organizar más movilizaciones.

Procoin se acogió al preconcurso voluntario en los primeros días de noviembre por un problema de liquidez, fruto de demoras en los pagos de sus clientes y afectada por la pérdida de la línea de circulante que le facilitaba el Banco Popular. Tras no llegar a un acuerdo de refinanciación con el resto de sus prestamistas, se declaró en concurso.