La crisis en la Mancomunidad del Cabo Peñas no es nueva. El PP lleva años sin participar al considerar que no es un ente que ofrezca servicios comunes, sino una estructura burocrática ineficiente. La postura de la izquierda ha logrado sacar adelante el ente supramunicipal. Hasta ahora.

Tras dos años de mandato de Jorge Suárez, alcalde de Gozón, llegaba el relevo de Amelia Fernández, alcaldesa de Carreño. En octubre de 2017 se decidió que la regidora asumiese la presidencia en noviembre, pero pidió un aplazamiento. El 20 de diciembre, en la Junta de la Mancomunidad, con la alcaldesa presente, se decide aplazar la toma de posesión al 3 de enero. Entonces, Amelia Fernández no se presenta y no asume la presidencia. Una situación que provoca que el Pleno de Carreño le pida su dimisión como alcaldesa del municipio.

Como solución de urgencia, IU y Somos Carreño piden a Jorge Suárez que siga al frente. El regidor de Luanco acepta con la condición de trabajar juntos para poner todo en claro y exhibe en el mismo momento documentación sobre irregularidades de sus predecesores. La mecha estaba encendida.