Hablar de Candás es hablar, entre otras cosas, de El Cubano. Con su cierre, hace casi dos meses, se perdió una parte importante de la historia de la localidad. Pero el emblemático restaurante, el santo y seña de la hostelería local, vuelve. Reabrirá sus puertas el 1 de junio con el mismo servicio, el mismo personal y el mismo aspecto de siempre.
Tras la jubilación de Doro Fernández en febrero, el encargado del local y cuñado del propietario, Quico (Francisco Vega) dio el paso al frente necesario para que El Cubano siga en activo y como siempre, ya que de su mano ha dependido el establecimiento en los últimos 27 años. "Todo va a seguir igual que antes", señala Quico, quien incluso se encarga de las obras. "Estamos dando un lavado de cara, dejando todo como estaba, pero mejorado".
La madera se está recuperando, se pulen los suelos, se rescatan elementos de siempre que pasaban desapercibidos? "Será el chigre de siempre. Y chigres como éste quedan muy pocos". Tanto que, incluso cerrado, El Cubano sigue siendo el lugar donde consultar las esquelas del día. Los clientes habituales seguirán viendo las mismas caras. El personal no cambia. Por no cambiar, ni las botellas de las estanterías rejuvenecerán. Tras la limpieza general, retornarán a su lugar de siempre. Y la cocina será la de siempre. No hay que olvidar a Nano, jubilado, cuya esencia ahí sigue. Volverán los candasinos a El Cubano. Y los ovetenses, los de Gijón, madrileños o de Tenerife. Muchos preguntarán, como siempre, por Nano. Y a todos atenderá, como siempre también, Quico.
