La Delegación del Gobierno en Asturias rechaza cualquier responsabilidad por el caos de tráfico originado el sábado en Lugones y La Fresneda por la celebración de una prueba ciclista, y Tráfico asegura que la decisión de encintar las calles fue tomada por la Policía Local de Siero ante la falta de efectivos para reabrir la circulación a intervalos. El cierre de las calles y de los accesos dejó atrapados a cientos de vecinos. Los representantes del Gobierno central en la región subrayan además que la autorización de la prueba no depende de ellos, sino del Principado, que pidió al Ayuntamiento de Siero un informe sobre posibles efectos de la prueba, que no se aportó.

La Delegación de Gobierno asegura no tener "ninguna responsabilidad ni competencia ni sobre esta carrera ni sobre ninguna prueba deportiva dentro del ámbito municipal o intermunicipal", que es responsabilidad del gobierno regional. Agrega que se limitaron a recibir una notificación de resolución de autorización, fechada el 2 de mayo, de la consejería de Presidencia, firmada por la directora general de Interior, Pilar Alonso.

Para la contrarreloj del sábado por la mañana, con motivo de la organización de la Feria Nacional de Ciclismo Bicispace, el Principado requirió informes a la Dirección General de Tráfico, a la Demarcación de Carreteras y a los ayuntamientos en los que se celebró la "Challenge" de la Montaña Central, Lena, Mieres, Aller y Siero. Pero aseguran que estos dos últimos no lo aportaron, como se constata en el informe emitido por la Jefatura Provincial de Tráfico. En la Delegación de Gobierno lamentan "el caos y las molestias causadas a los conductores", así como que el alcalde, Ángel García, y el portavoz de Foro, Eduardo Martínez Llosa, "desconozcan el procedimiento".

En los informes previos, Tráfico de la Guardia Civil ya advirtió de que esta contrarreloj podía afectar a la fluidez de la circulación, generando retenciones importantes en la salida 23 de la A-66 en ambos sentidos, entre las 11 y las 13 horas, por lo que la DGT lo advirtió en los paneles informativos de la autovía.

Este informe prosigue indicando que antes de que comenzara la contrarreloj, un oficial de la Guardia Civil acordó con responsables de la organización que tras la salida cronometrada de los 8 primeros equipos (de los 22 participantes, con un intervalo de 2 minutos entre ellos, hubiera una parada de 15 minutos "para reabrir la circulación y causar los mínimos perjuicios posibles a los usuarios de la vía de la zona". La circulación se restableció a las 12.10 horas. Agregan que los agentes "informaron en todo momento a los usuarios de la vía" para que buscasen alternativas a su itinerario. La Guardia Civil actuó en las carreteras AS-266, AS-17 y en la rotonda de esta última.

En el mencionado informe consta también que informaron al responsable de la Policía Local de Siero antes del inicio de la prueba de que "solamente se podría abrir la circulación en el sentido de la marcha de los ciclistas". Añaden que como no disponían de policías suficientes para cubrir todos los cruces, optaron por "cortar la circulación encintando aquellos lugares donde no tuviesen personal". El informe de la DGT concreta que "el oficial encargado de la seguridad de esta prueba realizó en tres ocasiones el recorrido, sin que apreciase apenas problemas circulatorios".