La localidad yerbata de Tabayes celebra hoy una noche de San Juan con peculiaridades. La principal de ellas, la plantación del omeru -o aliso- que tendrá lugar en la plaza del pueblo y cuyo origen, como bien recuerda el organizador de la fiesta, Mael García, se pierde en el tiempo.
La tradición manda que en la noche de San Juan los niños del pueblo participen en les "trastaes" (bromas que se gastan al resto de los vecinos), que se plante el árbol y, tras una cena y un baile, que se encienda la hoguera. Habitualmente, la fiesta se celebra el sábado más cercano a la noche de San Juan, y este año se da la circunstancia de que ha coincidido San Juan en sábado.
Los vecinos de la localidad saldrán a las seis de la tarde en busca del omeru, que está previsto que llegue al pueblo a las siete y media de la tarde. Una vez que se engalane y se prepare el árbol, se plantará junto a la capilla, como manda la tradición.
A continuación, tendrá lugar una actuación del grupo coral de la asociación "Entemuyeres", y se nombrará a los "Sanjuaneros del año". Una de estas menciones honoríficas corresponderá a Francisco Hevia Torrado, vecino nacido en el pueblo que se fue a vivir a Gijón hacia los años setenta y volvió en 1985. Él fue de los primeros que se preocuparon por recuperar el patrimonio etnográfico, empezando por su propio hórreo. Además, siempre ha sido colaborador de la fiesta.
El otro premio se entregará a la Asociación de Pensionistas y Jubilados de Bimenes, con una mención especial a Gerardo Corte, "Campeta", ya fallecido. El colectivo destaca por ser el más numeroso del concejo, con muchos asociados en el pueblo, y por su labor dinamizadora en el ámbito sociocultural.
Tras el nombramiento, habrá misa en honor del patrón, un pincheo, un festival de música tradicional y la hoguera, a las doce de la noche.
