Conduce su camión por los concejos de Gijón, Villaviciosa, Cudillero, Soto del Barco y por las Cuencas. Vanessa González es un ejemplo de lo que ella misma explica con claridad meridiana pues "no existen trabajos de hombres ni de mujeres, sino de quien los pueda ejecutar".

En un sector dominado por los hombres las mujeres van ganando su lugar y presencia en la carretera. Vanessa debe lidiar con los prejuicios de algunos que aún se sorprenden al ver a una mujer a los mandos de un camión grúa.

La experiencia le está sirviendo además para concienciar a sus vecinos sobre la importante labor que se realiza gracias al reciclaje. Ella misma se sorprende al ver como en los pueblos se recicla más que en los centros urbanos.

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