El futuro del parque de Paredes sigue en el aire. El pasado marzo, después de que el Juzgado de lo contencioso-administrativo número 6 de Oviedo obligase a Siero a devolver los avales para garantizar la construcción de zonas verdes junto al centro comercial, de un valor aproximado de 1,4 millones de euros, la Corporación acordó requerir a la promotora del centro de ocio, Desarrollo Comercial Parque Principado S. A., el mantenimiento del parque público. De momento, el Ayuntamiento no ha recibido una respuesta en firme de la compañía; si bien, fuentes municipales aseguran que los abogados de la compañía han solicitado "más documentación" y "un aplazamiento" al Consistorio, que espera que la situación pueda resolverse "de forma amistosa".
La decisión de requerir el mantenimiento de la parte pública del parque de Paredes a la promotora del centro comercial fue tomada por la Junta de Portavoces, basándose en la misma sentencia que obligaba a devolver los avales para la construcción de las zonas verdes públicas, que dejaba entrever que el mantenimiento de éstas recaía sobre Desarrollo Comercial Parque Principado S. A. "De momento no hemos obtenido respuesta en firme, pero confiamos en que la empresa, como nosotros, tenga voluntad de solucionarlo de la forma más amistosa posible", explica la concejala de Urbanismo, Noelia Macías.
El mismo fallo judicial sí reconocía la legitimidad de ejecutar el aval para el desarrollo de la zona deportiva privada, de un importe ligeramente inferior al millón de euros. El futuro de este área, en principio propiedad de Excarpri S. A., antigua promotora del centro comercial y actualmente en proceso de liquidación concursal, es "incierto", según el gobierno local, que hasta el momento no ha tenido noticias de que haya habido movimientos en esta zona, sobre la que en su día se proyecto la construcción de pistas de pádel, un aparcamiento y una cancha.
Tras más de una década bloqueado, el proyecto de la zona pública del parque metropolitano de Paredes parecía haber encontrado solución en mayo de 2017, cuando Liberbank -entidad que se había quedado con los avales que garantizaban el plan- y Siero alcanzaron un acuerdo para que la entidad bancaria asumiese los trabajos de reconstrucción de la zona verde pública a cambio de los avales. Cuando al proyecto sólo le faltaba sortear los últimos escollos administrativos para su inicio llegó la sentencia que truncó los planes municipales.
