Una vecina de Siero, que sufrió el desahucio de su piso de alquiler en abril de 2017, acudió a los tribunales porque el Ayuntamiento, inicialmente, le denegó la inscripción en el registro para acceder a una vivienda social al considerar que no cumplía con los requisitos. Guillermina Siciliano ya reside en una vivienda social en Carbayín Alto desde el invierno y el juez ha venido ahora a darle la razón. Condena al Consistorio a pagar 300 euros de costas.

La mujer interpuso un recurso contencioso administrativo para impugnar la resolución de la concejala de Bienestar Social, Igualdad, Consumo y Salud, Natividad Álvarez, del 8 de junio de 2017, por la que se desestimó su inscripción en el registro municipal de Vivienda "por incumplimiento de las condiciones establecidas", una cuestión que Siciliano rebatió, a pesar de "los informes técnicos que así lo corroboran".

Fue el 8 de mayo del año pasado cuando Guillermina Siciliano García lo solicitó al Ayuntamiento de Siero, pero el 18 de ese mes la trabajadora social emitió un informe desfavorable al considerar que no cumplía las condiciones requeridas. Por eso el 8 de junio se emitió la mencionada resolución que desestima su inscripción en el registro municipal de vivienda. Pero el 1 de febrero de este año, los servicios sociales municipales emiten un nuevo informe social, en este caso favorable a la inscripción, y el día 6 se acuerda darle de alta, con una puntuación de ocho puntos. La mujer reside desde hace meses en una vivienda social en Carbayín.

El magistrado del Juzgado de lo Contencioso-administrativo número 3 de Oviedo considera que "en este caso se conoce que la decisión es imputable a la interpretación que hace la demandada -Ayuntamiento- del cumplimiento de las condiciones establecidas". Determina "la desestimación del motivo de impugnación". En la sentencia se destaca que el Consistorio ha atendido la demanda de la mujer, por lo que estima el recurso interpuesto por ésta y declara nula la resolución recurrida.