"Llevo seis meses con este argayu". Así resume el vecino de Lieres Juanjo Díaz Guerrero su situación y su desesperación después de que, hace medio año, coincidiendo con unas intensas lluvias del invierno, se viniera abajo parte de la ladera que hay junto a su vivienda. Además, afecta, en la parte superior, a la senda peatonal de Viona, que ha tenido que ser señalizada para alertar del peligro. Eso sí, desconoce quién se ha encargado de colocar la cinta.
Explica que hace un tiempo se presentaron en la zona operarios que se identificaron como personal del Ayuntamiento para comprobar el estado del terreno. Pero ahí se quedó todo, dice. A través del alcalde de barrio ha intentado que le solucionen el problema porque, explica, en el Consistorio le dieron "mil vueltas".
Juanjo Díaz se queja también de que, cada vez que llueve, el agua arrolla y se le inunda la finca. Esta situación le está acarreando humedades en casa, pues tampoco puede desbrozar la maleza más próxima al inmueble por culpa del argayu.
El concejal de Somos, David Fernández Suco, que visitó la zona acompañado de la coportavoz de Podemos Siero, Violeta Arbesú, apuntó que ésta es "la enésima prueba de la importancia que la zona rural tiene para el equipo de gobierno". Destaca el trato poco ágil que ha recibido este vecino.
