Los usuarios del parque canino de Lugones denuncian que durante las obras de demolición de la antigua fábrica de Muebles Campa, en la finca aneja, han caído cascotes en la zona recreativa. Los vecinos señalan que la empresa que está realizando los trabajos no ha vallado la zona de las obras que dan al cercado y que, si no ponen medidas, "puede haber una desgracia".

Todo empezó, según los usuarios, "hace una semana". Fue entonces cuando un vecino, habitual con su perro en la zona, alertó a la Policía Local de que habían caído restos de materiales de construcción de la obra de demolición en el parque. "Pensamos que lo solucionarían en cuestión de horas, pero cuál fue nuestra sorpresa al ver que todavía hoy (por ayer), la situación seguía igual", lamentan.

Para los vecinos, esta circunstancia es "un auténtico riesgo". No sólo para los canes, sino para cualquier usuario. "¿Qué sucedería si pasa un guaje por allí y le cae un cascote encima?", se pregunta Joaquín Romero, quien destaca que esta infraestructura no sólo es utilizada por los animales.

Para solucionar este problema, los lugonenses lo tienen muy claro: vallar la zona susceptible de sufrir desprendimiento. "Ponen unas vallas en el área de riesgo para evitar que pase la gente y los perros y ya está. Con cuatro duros lo arreglas", resuelve Romero quien, por otro lado, está convencido que los usuarios del parque no pondría objeciones si fuese necesario tomar medidas a mayores como prohibir el acceso durante las obras.

La demolición de la antigua fábrica de Muebles Campa era una actuación muy demandada por los vecinos, que consideraban la vieja factoría un foco de insalubridad. Finalmente los propietarios de la parcela accedieron al derrumbe a instancias del Ayuntamiento.