La Asociación de Diseñadores Gráficos de Asturias (AGA) muestra públicamente su "apoyo al diseñador madrileño Julián Polvorinos, que ha visto utilizado ilícitamente su trabajo por el Ayuntamiento de Nava". Por eso desean que "logre resolver este asunto satisfactoriamente, al menos en la parte económica, pues el daño moral de la desvalorización y la usurpación de la propiedad intelectual ya está hecho".
Polvorinos reclama la autoría del diseño del "Culetón" por su gran parecido con el cartel con el que concurrió al concurso del cartel anunciador del Festival de la Sidra del año pasado. El diseñador reclama que le remuneren su trabajo.
Sus compañeros de gremio en el Principado dicen que, como asturianos, les "avergüenza este comportamiento de las instituciones", al considerar que deberían ser "ejemplo de buenas prácticas para todos".
Los diseñadores gráficos asturianos vuelven a apuntar a los "concursos mal planteados" -ejemplo, aseguran, del cartel anunciador del Festival de la Sidra- como el origen de problemas similares al de Polvorinos. El presidente de la mencionada asociación, Marcelino de la Fuente, que también es tesorero de la Red Española de Asociaciones de Diseño, explica que ya en su momento recriminó a los responsables municipales de Nava las que consideran condiciones leoninas de estos certámenes. "Nos piden que trabajemos gratis y sólo pagarán al ganador", afea De la Fuente, que lamenta, además, que "el jurado no es profesional y no eligen al mejor para cubrir las necesidades de comunicación del evento". Deja claro que "el diseño soluciona problemas de comunicación, no es arte".
De la Fuente incide en que, a través de este tipo de certámenes, "de forma gratuita obtienen propuestas gráficas", pues sólo se remuneran al ganador. "Funciona así en muchos lugares y no está bien. El error parte de aquí", recalca.
Por esta razón, para él, el caso de Julián Polvorinos "está muy claro", pues "presentó un cartel con un logotipo, conceptualmente bueno, aunque ganó otro. Pero les pareció una idea fabulosa para las 'letronas'". No cabe duda de que fue un acierto porque son muchas las personas que no se resisten a fotografiarse con el "Culetón", ya famoso en Nava, con la publicidad que ello conlleva para la Villa de la Sidra.
Además, Marcelino de la Fuente insiste en que "la propiedad intelectual de los diseños es del autor", y dicen sentirse ya "cansados de reivindicar el papel del diseñador en la sociedad", además de la propiedad intelectual de sus trabajos. Para paliar, en cierto modo, este problema que aqueja a su profesión están "promulgando la llamada a proyecto". Es decir, están implantando en varios ayuntamientos que en una convocatoria de este tipo los interesados presenten una propuesta básica y, aunque se elija sólo una, que será la que se lleve el montante más elevado, el resto también obtenga una remuneración por su trabajo.
