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La Pola | Maravillas del mercado

Tiempo para el rey de la huerta

El tomate, que está en plena temporada, es uno de - los productos estrella de los puestos de la plaza

Tiempo para el rey de la huerta

Los calores del verano traen siempre consigo uno de los productos estrella del mercado de excedentes poleso: el tomate. Así lo atestigua Olmo Santamaría, agricultor ecológico que produce en la finca El Arenal, de Muncó, y que ve cómo cada martes la gente acude atraida por uno de los frutos más preciados de la huerta.

"Los tomates se venden muy bien y son una puerta abierta a otros productos, como lechugas y calabacines", asegura. La razón de que se vendan tan bien en la plaza es que la gente valora su calidad. "No hay comparación con los que te puedes encontrar en los supermercados", sostiene el productor.

Las grandes superficies suelen elegir variedades que resultan visualmente atractivas, sin irregularidades ni huellas de ningún tipo, y casi siempre en detrimento de lo que debería ser su característica primordial: el sabor. Efectivamente, los clientes saben que los tomates de la huerta autóctona cuidados con mimo saben mucho mejor. En el caso de Olmo Santamaría, tiene dos variedades que siempre triunfan: el tomate rosa y el llamado "corazón de buey".

"El rosa es el que primero vuela; es una producción pequeña, y hay que venir pronto para encontrártelos, porque gustan mucho", señala.

En cuanto al "corazón de buey", tiene también buena acogida. Al igual que la variedad rosa, tiene mucha carne y mucho sabor. Ambas son variedades más delicadas de las tradicionales de un producto como el tomate que ya es delicado de por sí.

El fruto necesita calor y es sensible a la humedad, que lo puede dañar muy fácilmente, de ahí que en Asturias se cultive casi sin excepción en invernaderos. En cualquier caso, la temporada de tomate, que comienza a principios de julio y finaliza en torno al mes de octubre, es siempre garantía de éxito para los agricultores. El producto lo vale.

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