Noreña celebra hoy el que ya se ha convertido en su acto religioso más importante y multitudinario: la procesión de bajada del Ecce Homo. A las nueve y media de la noche, la imagen del Nazareno será trasladada de la ermita de la Soledad, donde está desde septiembre del año pasado, a la iglesia de Santa María de Noreña para la novena.
La hermana mayor de la Cofradía de Jesús Nazareno Ecce Homo, Menchu Cabeza, aseguraba ayer en la ermita, donde ya está todo listo para la procesión, que "la procesión de bajada es ya más fuerte que la de subida; hay más gente y se participa más; hace años bajábamos cuatro de Noreña, apenas había nadie, pero ahora hay muchísima gente".
Quizá la razón está en que es una procesión más recogida, y más atractiva porque es de noche, a diferencia de la de subida, que coincide con las fiestas en el pueblo. No obstante, la de subida, que se celebrará el domingo 14, tiene también un gran seguimiento por parte del público.
La imagen del Nazareno se ha retirado ya de la hornacina y se ha colocado en las andas. Además, se ha cambiado la cruz con la que el Cristo está en la hornacina, de tamaño más pequeño, por la de mayores dimensiones que porta en la procesión.
Este año, los costaleros de Noreña contarán con la ayuda de feligreses de Argüelles, que se han ofrecido a llevar la imagen. Serán unos doce costaleros de Noreña, más nueve de la parroquia vecina.
Todos ellos estarán de estreno para la procesión de hoy. La cofradía les ha comprado unos polos de color morado que sustitirán a las túnicas que llevaban hasta ahora. La razón del cambio es la comodidad de los costaleros.
La cofradía noreñense tiene algo más de 800 miembros y todos los años incorpora algún cofrade más. Son sus cuotas y los donativos que reciben lo que sufraga toda la actividad, sin ningún tipo de ayuda pública. Para la procesión de hoy, se repartirán velas entre los participantes. Serán gratuitas, si bien la cofradía admitirá donativos.
Oficiará los actos el párroco de Noreña, Pedro Tardón, acompañado de otros curas de parroquias de los alrededores de Noreña. Se esperan miles de personas para acompañar al Nazareno desde la ermita a la iglesia. Menchu Cabeza solo desea "que todo salga bien y acompañe el tiempo".
