La playa de Aguilar, en Muros de Nalón, muestra estos días una estampa inusual. Las grandes mareas que se producen en esta época hacen que el mar, en la pleamar, llegue al muro e incluso salte al paseo. Mientras, en bajamar, la orilla se queda en la lejanía, entre diez y quince metros más allá de lo habitual para deleite y sorpresa de los bañistas habituales.
Disfrutar de la emblemática peña del Caballar dando un paseo por su parte trasera, poco o casi nada vista, es un lujo sólo por estos días.
La amplia bajada de la marea permite, también, cruzar sin problemas a la cala del extremo izquierdo, conocida como La Cueva y sin accesos habitualmente.
Pepe Martín, vecino de San Esteban de Pravia, acude todos los días a caminar y darse un baño: "Ver la marea más de diez metros abajo de la peña es complicado, creo que nunca la vi tan abajo, las mareas fuertes suelen dejar pasar a la otra playa, pero no tanto como estos días".
Es como si Aguilar hubiese doblado su espacio, algo que dejó impresionados a una pareja de turistas de Madrid, Carlos Prieto y María Jesús Martín. Llevan varios por la zona y ya han ido al arenal tres veces. "La primera vez casi nos quedamos sin playa porque subió la marea hasta arriba y ahora está la marea más abajo del Caballar, es increíble", comentó Martín. Esto les permitió ayer descubrir la cala La Cueva a través de la gruta que separa ambas playas y que se puede cruzar con la bajamar: "Es impresionante cruzar por ahí, muy bonito", añadió Prieto.
También las madrileñas Beti Sánchez y Carolina Gutiérrez aprovechan las vacaciones en la zona y no dejaron pasar la ocasión de ver la imagen inédita del arenal.
"Nos han comentado que está la playa con la marea súper baja, como nunca antes la habían visto por aquí y aunque no hace muy buen día que digamos (por ayer, con niebla) nos animamos a venir y nos daremos hasta un baño", señaló Sánchez.
Aprovechando la bajamar para cruzar a la cala La Cueva estaban también Miguel Ruiz y Carmen Vaquero, asiduos de mayo a octubre. "Esta cueva nada más que se puede cruzar con la marea muy baja y fíjate que esta vez también se puede pasar por fuera bordeando el acantilado, por lo que la marea está muy, muy baja", indicó Ruiz, quien agregó que las bajamares se producen entre diez y doce veces en primavera y verano, aunque nunca la habían visto como esta vez.
Menos importancia le da José Luis García, vecino de Muros de Nalón, quien asegura que esta situación es de lo más normal en esta época, "aunque sí es verdad que está más baja que otras veces".
