El cineasta Samu Fuentes abrió ayer las fiestas del Ecce Homo de Noreña con la lectura de un pregón en el que no dudó en poner la fiesta en el centro de la vida de su generación durante años. "El Ecce Homo marcaba para nosotros el final y el principio del año. Era donde siempre se concretaban cosas (ligues, pequeños rollos, curso escolar venidero, en qué clase y con quén te tocaba, el campeonato de baloncesto en el colegio de las monjas y las semanas previas de piquillas y de concretar los fichajes).

Para él, además, la fiesta marcó un antes y un después por un suceso que le cambiaría la vida. Contaba 23 años cuando sufrió un accidente de tráfico en bla madrugada del domingo al lunes del Ecce Homo. "Me hizo volver a nacer y, sobre todo, me llevó a replantearme la vida. Y hoy, con justamente otros 23 años de más recién cumplidos, me encuentro aquí para tener el honor de dar comienzo a estas maravillosas fiestas".

Aquella fatalidad le hizo cambiar la perspectiva de las cosas y darse cuenta de que, "para tomarse la vida en serio, muchas veces hay que tomársela más a broma y, sobre todo, disfrutarla". Por eso invitó a todo el mundo a festejar. "Y unas fiestas como estas son la excusa perfecta para reírse y divertirse".

El pregón de Fuentes estuvo plagado de alusiones a buenos amigos, con los que pasó grandes episodios en su infancia, y a amistades que siguen vivas después de muchos años. También elogió la vida de pueblo de Noreña. "La palabra pueblo para mí no tiene nada de peyorativo y, de hecho, cada vez me gusta más. La idea de vivir en un sitio tranquilo donde todos sus vecinos se conocen me parece muy buena e idílica", dijo, y a renglón seguido señaló que "deberíamos de plantearnos muy seriamente el tema de presentar nuestra candidatura a 'Pueblo ejemplar de Asturias'. Yo creo firmemente que el noreñense es un fiel representante de las bondades que se nos asocian a los asturianos".

Fuentes elogió la gastronomía, la proliferación del deporte, el asociacionismo y el hecho de que Noreña "no ha perdido su esencia".

La alcaldesa de Noreña, Amparo Antuña, y la edil y presidenta de Sonofe, Ana González, presidieron el acto. Antes de la lectura del pregón, se coronó a la reina de las fiestas, María Arrojo, que recibió la corona de su antecesora, Nara Teijeiro, y a la reina infantil, Gabriela Teijeiro, que relevó a Carlota García.