Un total de ocho edificios del concejo de Nava han sido incluidos en el Inventario de Patrimonio Cultural de Asturias (IPCA). Se han integrado en la lista tres construcciones de carácter religioso, la capilla de Santa Lucía, en Ceceda; la capilla de los Santos Mártires, en Llames Bajo, y la iglesia parroquial de Nuestra Señora de Los Remedios.

También han sido incorporadas tres viviendas: un chalet unifamiliar y la casa conocida como Villa Maximina, situadas en Nava, y la casa de Juan Antonio Llamedo, en Ceceda. Y además, quedan registradas dos construcciones palaciegas: el palacio de Faes, situado en la localidad de Villabona, y el de La Cogolla, ubicado en la localidad homónima, ambos en la parroquia de San Bartolomé de Nava. El de La Cogolla sufrió un incendio en el año 2016, y desde entonces tanto los vecinos como la oposición han clamado por su recuperación y protección.

Había otros dos edificios cuya inclusión en el catálogo Nava había solicitado y que no fue concedida pero no porque no merecieran la protección sino, al contrario, porque ya contaban previamente con ella. Uno era el palacio de la Ferrería, que no solo está incluido en el inventario como yacimiento arqueológico, sino que ya fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) la figura de máxima protección. El otro es la iglesia de San Bartolomé, que ya figura en el inventario como yacimiento arqueológico desde el año 2013.

La inclusión en el inventario es la segunda figura de protección después de el BIC, que se destina a los bienes muebles e inmuebles que tengan valores patrimoniales en grado notable.

Implica un régimen que coincide en buena medida con el de los BIC, desde el momento en que solo se autorizan intervenciones que respeten sus valores históricos y culturales y que no pongan en riesgo su conservación.

Otros seis elementos que Nava proponía que se incluyesen en el inventario quedaron fuera, todos ellos porque la Consejería de Educación y Cultura del Principado consideró que carecen de un interés suficiente. Se trata de varias viviendas y del propio Ayuntamiento de Nava.

No obstante, el municipio tiene la potestad para establecer su propia protección, aunque es en un grado menor: incluirlas en su catálogo urbanístico con protecciones parciales o totales.