Prácticamente la mitad de las viviendas registradas en Candás cuenta ya con un cubo marrón para separar los restos orgánicos (fundamentalmente alimentos cocinados y no cocinados) y permitir su reciclaje, lo que revela un alto nivel de aceptación por parte del vecindario de este nuevo modelo de recogida de residuos desarrollado entre el Ayuntamiento de Carreño y Cogersa.

El servicio de recogida separada de materia orgánica se realiza puerta a puerta con cubos de color marrón, los martes y los viernes, días en los que no se colocan los cubos negros. Además, el Ayuntamiento ha colocado una treintena de contenedores para biorresiduos en varios puntos estratégicos de la villa, que se usan mediante una llave que las familias participantes en el programa pueden solicitar de forma gratuita en los puntos de atención, ubicados en la plaza de La Baragaña y en el Centro Polivalente.

La alcaldesa, Amelia Fernández, asegura que es "una buena noticia" y llama a la colaboración vecinal de Candás.