El otoño es tiempo de buenas cosechas en las huertas de Villaviciosa, y en la plaza de abastos se puede ver una buena muestra y variedad de ellas. Berenjenas, tomates, arbejos, cebollas, ajos puerros, repollos, pepinos y hasta enormes calabacines, entre otras hortalizas, verduras o frutas, se pueden encontrar los días de mercado en la plaza de abastos maliayesa.

Pero lo que más llamó la atención en el último mercado fueron las novedosas patatas chinas y chayotes que cosechan en Candanal el matrimonio formado por Mercedes Costales y Mario Álvarez y su hija Dolores, la aficionada de la familia a plantar especies raras. Explican Merce y Mario: "Estas patatas son de plantas trepadoras que tenemos en la huerta desde hace dos años, y este es el primero que las vendemos. Saben como las patatas normales, y son muy jugosas, pero la china es un poco más dulce. Son de textura muy suave y agradables para comer. Las vendemos a un euro la pieza".

Dolores Álvarez es aficionada a experimentar plantando nuevas especies en su huerta de Candanal, en el valle de Peón, y explica: "La patata chayote es originaria de Centroamérica y ahora se planta también mucho en Canarias. Las plantas de patata china me las regaló un amigo chino de Gijón, y su consumo está muy extendido por los países asiáticos". Dolores también ha experimentado cocinando las novedosas patatas. "Las he preparado de varias maneras: en tortilla con un poco de cebolla, que queda muy sabrosa; también se pueden preparar como patatas fritas normales, asadas, en ensalada o en puré... de todas las formas están muy ricas", asegura. Dolores explica que este es el primer año que tienen cosecha de estas curiosas patatas: "Ahora en octubre están en su punto de madurez perfecto, contienen mucha fibra, agua, y muy pocas calorías. Yo las recomiendo".