En Muros de Nalón tendrán en poco más de un año, si se cumplen los plazos, una casa que ahorra. Tal cual. No serán sus inquilinos los encargados de mirar por la economía familiar, sino la propia vivienda.
El Principado puso ayer la primera piedra de un edificio de viviendas que cumplirán llamado el "estándar Passivhaus" de eficiencia energética. Es el primero de Asturias, tanto por la certificación como por ser una iniciativa colectiva. Las obras, con un coste de 1,7 millones, pondrán a disposición de la población 20 pisos cerca de la estación de Feve con trastero para alquiler y tienen un plazo de ejecución de 14 meses.
Al inicio de las obras asistieron el director general de Vivienda, Fermín Bravo, y la alcaldesa de Muros de Nalón, Carmen Arango.
Los pisos contarán con una superficie de unos 50 metros cuadrados, Además, tendrán aerotermos individuales para la producción de agua caliente sanitaria y la calefacción será por aire para aprovechar el sistema de ventilación de doble flujo. Bravo destacó que la nueva actuación permitirá reducir un 75% las necesidades de calefacción y refrigeración, con el consiguiente ahorro para los futuros inquilinos.
