Más de la mitad de las multas puestas este año en Siero a dueños de perros por incumplir la normativa de tenencia de animales fueron consideradas graves o muy graves. En total, en lo que va de año se han tramitado 17 sanciones, de las cuales sólo siete fueron consideradas de carácter leve. Las de mayor gravedad fueron remitidas al Principado para su estudio y sanción.
Los datos de 2018 mantienen cierta relación con los del año anterior. En 2017, el 54 por ciento de las multas impuestas por este motivo fueron consideradas graves o muy graves; cinco puntos por debajo de la cifra actual.
Estos datos también reflejan que la media de sanciones por mes se ha relajado este año. A lo largo del año pasado se pusieron un total de 26 sanciones, lo que deja una media de 2,2 sanciones por mes. Los primeros diez meses del año en curso arrojan un descenso en esta media de 0,8 puntos; dejando una ratio de 1,4 sanciones por mes.
Las infracciones leves, en las que estaría incluido no recoger excrementos o pasear a los perros sin correa, acarrean multas de entre 300 y 750 euros. Las graves o muy graves, aquellas entre las que, por ejemplo, se encuadran los animales sueltos sin control o pasear a los canes sueltos a una distancia lejana, conllevan sanciones que oscilan entre 751 y 1.500 euros, en el caso de las primeras, y entre 1.501 y 3.000 euros, en las segundas.
Atendiendo al relato de la niña atacada por un bóxer en el entorno del parque canino de La Fresneda, suceso en el que recibió 26 dentelladas por las que se encuentra ingresada en el hospital, la tipificación de la infracción del dueño del can sería considerada como grave o muy grave. Será trabajo del Principado determinar si se aplica o no multa al dueño de este perro.
