La iglesia de Santa María de Suares, en el concejo de Bimenes, está en mal estado, y un grupo de feligresas de la parroquia se ha propuesto acabar con todas sus deficiencias. El templo fue construido en 1969 precisamente con el apoyo y la colaboración de los vecinos de la parroquia, y ahora parece que ha llegado el momento de que todos vuelvan a arrimar el hombro para dejarla en buen estado. "Esta iglesia la hizo el pueblo, la gente trabajó mucho y pusieron dinero", explica Viri Castro.
Y ahora parece que llega el momento de hacer otra vez lo propio. Porque las deficiencias que tiene el templo no son cualquier cosa. Lo más importante, según apuntan las promotoras de la iniciativa, es reparar la cubierta. Porque están apareciendo humedades por varios puntos. "Antes había una mancha de humedad pero ahora ya hay más, y esto si se deja va a ir a peor, van a aparecer grietas", sostiene Viri Castro. La humedad ha afectado a la pintura, y además las ventanas están en muy mal estado y habrán de ser sustituidas.
Otro problema es la ausencia de canalones. Necesitan ponerlos nuevos, y son conscientes de que no será barato: los de plástico están prohibidos, y tendrán que colocarlos de cobre o zinc, que son bastante más caros.
También el revoque del exterior ha dado problema. Recientemente, ha habido varios desprendimientos que han obligado a precintar el exterior.
Se calcula que la obra costará en torno a 30.000 euros. Hasta ahora, han recaudado 2.000 euros con la venta de lotería, y la parroquia dispone de otros 5.000 euros. Además, el Arzobispado se compromete a pagar el 20 por ciento del coste de la obra.
Entonces, para poder financiar toda la obra necesitan más donativos, y por ello solicitan del apoyo de todos los vecinos. La idea es, una vez conseguido el dinero, comenzar las obras a la mayor brevedad.
