Las grietas en el puente de Quinzanas (Pravia) sobre el río Narcea no paran de crecer, aumentando al mismo tiempo el hundimiento de la calzada. Un deterioro que hace peligrar cada vez más la estabilidad de la estructura, sobre todo en la pilastra central, y que, con las crecidas del río con las últimas lluvias, han aumentado. El proyecto para su arreglo está en trámite de licitación en el Principado de Asturias pero la concejala de Obras, Sonia Álvarez, estima que es necesaria una mayor diligencia: "Desde el mes de julio cuando se advirtió, de un día para otro va a más y su situación irá empeorando con el invierno, es necesaria una tramitación de urgencia".
La ingeniera de Caminos de la mancomunidad "Cinco Villas", Ángeles Carazo, señala que el puente de Quinzanas "ha experimentado, a la altura de la primera pilastra sobre el río, un cambio en la rasante, apreciándose un hundimiento en todo el ancho". Un deterioro que se nota también en las fisuras que han aparecido en el pavimento, sobre todo en la margen izquierda, que ha hundido también la barandilla.
El retraso en la licitación del proyecto, con un presupuesto de 18.921 euros y un plazo de ejecución de un mes, preocupa en el Consistorio praviano. "Se licitará a finales de octubre porque hubo una baja temeraria entre las empresas que se presentaron, luego tienen que licitar las obras y adjudicarlas y nos plantamos en pleno invierno y la corriente no para de machacar la pilastra".
Un deterioro imparable con la fuerza del río en invierno, que empuja a la concejala a solicitar un trámite de urgencia para el puente, que da acceso a las localidades de Quinzanas y Pronga.
Además, si los plazos marchan sin paralizaciones, las obras podrían comenzar en plena temporada de pesca del salmón en el Narcea, afectando al puente de Quinzanas pues es uno de los pozos emblemáticos de la cuenca. y atrae a muchos pescadores de fuera de la región. Por lo que, de estar en obras, supondría un impacto para la economía ligada a la pesca en la zona.
