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"Nos quedamos con que no hubo víctimas", dicen los afectados por el incendio de Noreña

Los vecinos de las dos casas siniestradas, que "lo han perdido todo", lamentan los cuantiosos daños materiales causados por el siniestro

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Incendio en una vivienda de Noreña

"Nos quedamos con que no hubo víctimas, al fin y al cabo eso es lo importante". Así opinaban ayer los familiares del hombre cuya vivienda se incendió la noche del pasado jueves en la calle La Soledad de Noreña, junto a la capilla del Ecce Homo.

El siniestro fue muy grave, y afectó tanto a la vivienda en la que se originó como a la que tiene adosada y en la que vive otra familia noreñense. Ayer por la mañana podía verse la magnitud de los daños en una y otra vivienda, que tenían la cubierta totalmente desprendida, los canalones retorcidos por el fuego y desprendidos y el interior lleno de escombros. Aunque se conservaron todas las paredes exteriores, la vivienda quedó completamente calcinada.

"Todavía no sabemos realmente lo que originó el incendio", dijo un familiar del afectado. El siniestro comenzó el jueves hacia las diez y media de la noche, cuando el vecino se encontraba en el interior de la vivienda. "Por suerte, pudo salir a tiempo", comentó el familiar. Incluso trató de sofocar las llamas con una manguera desde el exterior. Pero no pudo hacer nada por detener las llamas. Se trata de una casa antigua que, además, tenía mucha madera en su interior, lo que hizo que el fuego se extendiera con más fuerza.

Cuando llegaron los bomberos, que llegaron a movilizar seis vehículos para la extinción, se encontraron con el fuego muy avanzado. Se había extendido con una rapidez extraordinaria. Habían acudido efectivos de los parques de La Morgal, San Martín del Rey Aurelio y Avilés, con el jefe de la zona centro al frente.

Además, el operativo de extinción se encontró con algunas dificultades, entre ellas la presencia de varios cables situados en el alero del inmueble, que dificultaban su trabajo, con lo que hubo de solicitarse la presencia de técnicos de la compañía eléctrica.

El fuego estuvo activo varias horas, y los bomberos no lo dieron por controlado hasta casi las dos y media de la madrugada. Entretanto, fueron muchos los vecinos que acudieron una vez que vieron la magnitud de las llamas. Finalmente, las dos viviendas afectadas sufrieron daños muy graves.

Los vecinos de la vivienda adyacente a la del origen del incendio se encontraban también en casa cuando comenzó el incendio, y por suerte también pudieron salir ilesos del siniestro, pese a su magnitud.

Sus familiares señalaban, asimismo, que se encontraban muy afectados por los daños, porque habían "perdido sus recuerdos y sus enseres", pero por otra parte se alegraban porque no les había pasado nada. Ambas familias trataban ayer de recuperarse del duro golpe de ver cómo su vivienda se veía reducida a escombros en tiempo récord.

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