Los alcaldes de barrio de El Cuto y Santiago de Arenas, Carmen García y Cándido Martínez, respectivamente, se reunieron ayer con representantes del PP de Siero en el centro de rehabilitación de Carbayín Alto, que durante años llevó la asociación Cébrano y que está cerrado desde 2013, para pedir que se retome la actividad.

La portavoz del PP, Beatriz Polledo, recordó que su partido había presentado una moción hace dos años para convertir el edificio en centro de día, y la Corporación lo aprobó por mayoría. A pesar de ello, desde entonces no se hizo nada.

Desde que Cébrano cesara su actividad, en 2013, el edificio ha sido objeto de numerosos asaltos y actos vandálicos. "Por dentro está destrozado, y lo único que se ha hecho en este mandato es tapiar las entradas, pero nada más", dijo Polledo, que acudió a la zona acompañada por el edil Cristóbal Lapuerta y el presidente de Nuevas Generaciones del PP, Javier Mateus. Allí se encontraron con varios vecinos.

Todos están de acuerdo en que se le debe dar un uso al edificio, que no hay que olvidar que costó 600.000 euros, financiados con fondos mineros. Es un entornocon más de 2.000 habitantes, y con una población envejecida, y el centro podría ser un vehículo para dinamizar la zona.

También solicitaron que se ensanche la carretera hasta el edificio, que es la misma que da al cementerio, y que tiene un paso muy estrecho en el que no se pueden cruzar dos coches.

Por otra parte, Cándido Martínez pidió una mayor presencia de la Guardia Civil en la zona, eespecialmente por la noche, dado el aumento del número de robos. Sin ir más lejos, en menos de un mes hubo dos robos en la gasolinera de Carbayín Alto, en los cuales los ladrones rompieron las lunas y fueron a por el dinero de las máquinas tragaperras.