Los candasinos dieron ayer el último adiós a Luis Manuel Lombao, de 36 años y cuya muerte ha conmocionado la villa por las circunstancias en las que se produjo. Falleció de forma repentina la mañana del miércoles cuando se dirigía con su padre al centro de salud después de sentirse mal. Sus vecinos y amigos le recuerdan como "un chaval muy cariñoso y educado". Muchos fueron los que quisieron arropar ayer a su familia en el funeral, en la foto.