"Con la máquina tragaperras no pudieron y se llevaron la de tabaco enterita". Así se expresa Roberto Fernández, propietario de la cafetería Edi de Grado, asaltada en la madrugada del jueves por un grupo de ladrones que realizó un alunizaje con una furgoneta sustraída minutos antes en un garaje de la calle La Flor. Es el segundo robo en lo que va de semana tras el asalto en la noche del martes a la sidrería Casa Pepe El Bueno, donde se llevaron el cambio del día.
Ambos hechos delictivos están siendo investigados por la Policía Judicial de Tudela Veguín y el equipo ROCA (Robos en el campo), además de por el puesto de la Guardia Civil de Grado. Además, los agentes ya se encuentran inspeccionando imágenes de cámaras para tratar de identificar a los asaltantes.
"Cerré a la una de la mañana y a las dos y dos minutos sonó la alarma. Vine en la furgoneta fijándome y di una vuelta antes de ir al cuartel, pero ya no estaban", recuerda Fernández, quien ayer tuvo que abrir más tarde su negocio a cuenta del robo. Los cacos entraron en la cafetería estampando la furgoneta robada en La Flor, que ayer por la mañana fue hallada por la Benemérita en Castañeo. "Estuvieron un rato con la tragaperras, pero no sé qué hicieron que no podían con ella, y fueron a lo fácil", señala el afectado.
El robo en la cafetería de El Casal se sumó al producido en Pepe El Bueno en la noche del martes. Uno de los cacos alcanzó el balcón del comedor y, tras forzar la puerta, entró en la sidrería para llevarse el cambio de la caja. "Cuando vine por la mañana llamé a mi hermano a ver si era que lo había llevado él. Luego subí al comedor y ya vi la puerta abierta", comenta el propietario, Roberto Fernández. Según detalla, el ladrón se tapó las manos con "unos calcetines o algo así" para no dejar huellas.
Los dos robos están siendo investigados por la Guardia Civil, dependiente de la Comandancia de Oviedo, que confía en que gracias a las pruebas practicadas durante la investigación se dé con los autores de los robos con fuerza y el alunizaje.
