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Flojo comienzo de la temporada de centollo

"Tenemos más encargos que marisco", lamentan los pescadores de Tazones, que confían en que mejore la costera

Sergio García, con dos centollos recién capturados. M. MENÉNDEZ

Los pescadores de Tazones han iniciado una costera del centollo que prevén "floja". Aunque la inauguraron el día 15 y las malas condiciones de la mar no les ha permitido salir muchos días a faenar, perciben que hay escasez de este exquisito crustáceo, muy demandado en estas fechas navideñas. Lo confirma Sergio García: "creo que va a ser flojo". Si los dos últimos años han sido buenos para el centollo, ahora notan que "hay menos", aunque no lo achacan a ninguna razón concreta. La temporada continúa hasta el 31 de julio y ayer fue el último día hábil del año de pesca.

Su precio oscila entre los 15 y 20 euros el kilo, y el de Tazones, al igual que los que se capturan en la costa entre Lastres y Gijón, es especialmente valorado. Goza de buena fama gracias a los suelos marinos de esta franja costera, que proporcionan una alimentación que los hace más sabrosos.

A la hora de elegir un centollo para echar a la cazuela, Sergio García indica que "va en gustos", pues no hay nada escrito sobre si saben mejor los grandes o los pequeños. También hay quien tiene preferencia por los machos y otros se decantan por las hembras. Los primeros tienen más sabor y las segundas, más carne. Recomienda cocerlos con agua de la mar, "como cualquier marisco, porque así no te equivocas con el punto de sal".

Aunque la temporada no ha comenzado con muchas capturas, los pescadores de Tazones confían en que vaya mejorando, a pesar de que "es un mal indicador que a principios de campaña no haya".

Lo corrobora Clara Carneado: "está flojo. No hay casi nada". Pero "habrá que confiar" en que la situación mejore , dice, si bien "por el verano ya había menos y se veía". Así que, "al haber poco, tenemos más encargos que marisco", indica. Lamenta que hasta el miércoles ya no pueden salir a faenar, pues han de quedar en casa el lunes y el fin de semana. Ni los temporales en la mar de la semana pasada ni la calma de días como ayer están favoreciendo las capturas, que están siendo más bien escasas.

Aunque la Navidad es una época del año en la que se incrementa la demanda de pescado y marisco, para los pescadores de Tazones la primavera y el verano son temporadas de ventas más fuertes por el turismo. La mayoría vende el género a los restaurantes locales.

En estas fechas triunfan, sobre todo, el rape (pixín), la merluza y el marisco, además del cabracho (tiñosu) para el paté. Aunque la calma de la mar no acompañó ayer para pescar muchos ejemplares, en el barco de Sergio García, "Merón", trajeron a puerto lubina, chopa, lenguado, golondru, dentón, tiñosu y centollo. En general, aprecian que cada vez hay menos pescado en la mar. En Tazones hay siete embarcaciones que salen a faenar, la mitad de las que había hace unos 30 años.

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