Un buen número de adolescentes se agrupaba ayer a las puertas de la Casa de la Juventud de Posada de Llanera. Esperaban ansiosos a que abrieran las puertas de la Nochevieja joven, organizada por el Consistorio local. "El alcohol no lo queremos ni ver. La idea es juntarnos con los amigos y pasarlo bien estos días de vacaciones", manifiesta Aitor Asueta justo antes de que dé comienzo la noche.

Las cincuenta entradas estaban agotadas ya con mucha antelación. "Se las damos porque les presta tener un pase, como si fuera para una fiesta", explica la concejala llanerense de juventud, Pilar Fernández.

Allí no solo había chavales de 13 años, sino también algunos padres, que se mostraban encantados con la iniciativa municipal. "Me parece estupendo. Es genial esta iniciativa de juntar a los críos del concejo y que lo pasen bien de una manera controlada".

Pasadas las 21.30 comenzó el jolgorio, y para animarlo estaba Isidoro del Llano. "Mi labor es hacer que la fiesta no decaiga en ningún momento. Tengo que improvisar porque cada público es distinto", comenta el showman.

Rápidamente los jóvenes comenzaron a dar cuenta de los bollos preñaos, tortillas, embutidos y empanadas preparados para la ocasión. "La comida gratis es un incentivo", bromea Iván Suárez, que asistía al evento con un grupo de amigos. Sonaron "Paquito el chocolatero", "Saturday Night" y "La conga". Las botellas de agua y de refrescos rápidamente se agotaron entre bailes, bromas y las uvas. Así acabó la tercera edición de esta Nochevieja joven, sana y adelantada.