"La única opción para que el colegio de Logrezana no cierre es conseguir nuevo alumnado". La dirección del centro rural carreñense que el Principado tiene previsto cerrar el próximo curso ante la falta de alumnado, lo tiene claro: la única opción de supervivencia reside en aumentar la matrícula. Pese a todo, su director, Secundino Iglesias, alegará contra la decisión de la administración regional.

Tal y como explica el director, en el centro de Logrezana se ofertan los tres cursos de Educación Infantil y los cuatro primeros de Primaria. Para el último ciclo de la enseñanza básica los estudiantes se trasladan a uno de los dos colegios de Candás. Actualmente, el colegio rural cuenta con un alumno por curso en cada nivel de Primaria, por lo que la previsión es que el año que viene se queden con sólo tres alumnos.

Es este escenario el que ha llevado al Principado a tomar la decisión de cerrar el centro. "Es una pena porque la dotación del centro es muy buena, pero es hasta cierto punto entendible que la Administración no pueda mantenerlo abierto con tan pocos alumnos", se resigna Iglesias.

En su aviso de cierre, el Principado hace referencia a una clausura "temporal", si bien el director del colegio entiende que una hipotética reapertura es casi imposible. "Va a ser muy difícil juntar el alumnado necesario para que se plantee la reapertura con el centro cerrado", lamenta el director y tutor de los escolares.

Pese a todo, en Logrezana no tiran la toalla. La dirección del centro solicitará al Principado que reconsidere su postura. "Pediremos que lo mantengan abierto mientras siga habiendo matrículas", desvela Iglesias, consciente de que en su mano no está hacer mucho más.

El equipo directivo del colegio de Logrezana no estará solo en su lucha por mantener las puertas del colegio abiertas. El Pleno de Carreño ya aprobó el pasado 27 de diciembre una moción de apoyo a la causa. Los vecinos también están por la labor y tratarán de ayudar a captar nuevo alumnado.

"Lo ideal sería tener nuevos escolares de 4 años, aunque todo lo que sea reactivar la matrícula es bienvenido; luego ya veríamos las edades y el futuro del centro", expresa Iglesias, quien, además de director, también es tutor de los escolares. En el centro trabaja, asimismo, una profesora de Inglés a media jornada y cuentan con el apoyo de maestros itinerantes para impartir las asignaturas específicas.