El Principado contratará el proyecto de la obra de la variante de Cayés en primavera, un proyecto con una gran demanda en Llanera y que lleva más de una década de trámites y discusiones. Así se lo aseguro ayer el consejero de Infraestructuras, el socialista Fernando Lastra, al alcalde, también del PSOE, Gerardo Sanz. En la reunión, en la que también estuvo presente el director general de Infraestructuras, José María Pertierra, Lastra también aseguró que el proyecto de la circunvalación de Posada saldrá a exposición pública dentro de dos semanas y que la obra de la carretera entre San Cucao y Cayés comenzarán en la segunda quincena de febrero.

Lastra trasladó a Sanz que el calendario fijado para la variante de Cayés viene determinado por el periodo de exposición pública al que tuvo que ser sometido el trazado elegido, que discurrirá por la ribera del Nora tal y como preferían vecinos y Ayuntamiento. El plazo de alegaciones finalizó ahora, y en este periodo se presentaron tres reparos.

La consejería responderá estas alegaciones en los próximos días y, a continuación, someterá la actuación al dictamen de la Comisión de Asuntos Medioambientales (CAMA) y cumplirá con los trámites ambientales ordinarios, que se espera culminen en abril. Será entonces cuando saquen la licitación del proyecto de obra de la circunvalación.

Infraestructuras también anunció novedades en la variante de Posada. Lastra aseguró a Sanz que en dos semanas saldrá a exposición pública el proyecto, un trámite que el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) mandó reiniciar sentencia mediante el pasado noviembre. La idea del Principado es que en este plazo, con las propuestas de administración local y vecinos, se termine de perfile un proyecto que confían en aprobar durante el presente ejercicio.

Los planes a corto plazo de Infraestructuras para el concejo no acabaron aquí. Lastra también aseguró que en la segunda quincena de febrero comenzarán las obras de mejora en la carretera que une San Cucao y Cayés, una actuación que tendrá un coste para las arcas regionales de 300.000 euros.

Los proyectos de las variantes son dos históricas demandas vecinales. Especialmente la de Cayés, por cuya materialización los vecinos llevan décadas peleando. Actualmente, los parroquianos denuncian que están sometidos a un gran volumen de tráfico pesado, lo que afecta a la seguridad vial de la zona y a sus niveles de contaminación, tanto en el aire como acústica.

La circunvalación de Posada también es una vieja aspiración vecinal, aunque en este caso hay más voces disonantes. Hay quien teme que la desviación del tráfico del corazón de la capital pueda repercutir negativamente en sus comercios.