Dentro de unos días será el Día del Padre y se llena la memoria de recuerdos. Seguro que más de uno de los lectores pensará en aquella foto olvidada, con imagen impresa del santo de vara florida en el que se había rotulado con letra aparentemente manuscrita un "Feliz día del Padre". Hay a quienes nos sigue hipnotizando que los hijos, ya padres a su vez, nos den un fuerte abrazo y sonrían con la entrega del destornillador de muchas bocas, el pañuelo o la camisa. Sé que hoy los distintos modelos de familia exigen prudencia en estas cosas, porque aunque vi un cartel que manifestaba que el padre "es único", puede ser que no sea así. Lo que sí me parece es que pueda seguir siendo San José el patrono. Él sin ser biológicamente el padre lo era a todos los efectos. Una de las cosas grandes que tiene la nueva concepción de familia, rompiendo con el estereotipado modelo de hace medio siglo, es que personas, sin ser los padres, asumen al papel con un compromiso y responsabilidad encomiables. Para el martes, feliz día a todos.
