"La valoración es muy positiva. Estamos muy contentos porque es un reconocimiento y un elemento de protección que cataloga perfectamente la manifestación cultural o tradición de los Sidros y les Comedies". Celso Roces, miembro de la asociación "El Cencerru" pone así voz a la alegría que sienten los vecinos de Valdesoto (Siero), después de que el lunes el Consejo de Patrimonio Cultural aprobara la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC).
Aunque confía en que no ocurra, pero Roces destaca que si estas representaciones "se vuelven a perder, ya existe documentación de cómo eran", no como les pasó hace unos 15 años, cuando las trataron de rescatar del olvido. "Esperemos y creo que no se volverán a perder", apunta, pues además del arraigo conseguido, han logrado implicar a los niños y jóvenes con la intención de que sigan adelante con esta tradición, recogiendo el legado de sus antepasados.
La asociación "El Cencerru" no lo tuvo tan fácil cuando recuperó los Sidros y Comedies. En ese momento, explica Celso Roces, tuvieron que acudir a La Rasa (Carbayín), donde en los años 80 del pasado siglo ya habían indagado en esta expresión cultural gracias al recuerdo de los mayores de la zona. Pero la recuperación tuvo lugar en Valdesoto por ser un lugar central en la parroquia.
Agrega que una de las cuestiones que tuvieron claras desde el primer momento fue involucrar a los niños, de ahí los escolares (los escolinos de Faes) inauguren les Comedies con una representación propia, que escenifican previamente a la de los adultos. También es el trampolín para esta última. De hecho, dos de los actores, que empezaron en la obra infantil ya han dado el salto a la de los mayores. "Una de las cosas en las que hacemos hincapié para que no se pierda es tratar de implicar a los críos en la gestión de los Sidros y Comedies", destaca Celso Roces, que también valora positivamente el que un notable grupo de niños participe.
En la misma línea se pronuncia Pablo "El Sidru", miembro de la asociación "El Cencerru": "estamos muy contentos". Agrega que el reconocimiento de BIC "es algo muy importante porque es un grado de conservación para la mascarada mucho más importante". Es la razón por la que ya en 2009 iniciaron este proceso que ha durado una década. Pero lo han conseguido: por fin, los Sidros y Comedies de Valdesoto son de las pocas representaciones culturales que se han colado en la lista de Bien de Interés Cultural en Asturias. Están al mismo nivel que la cultura de la sidra -que aspira a ser Patrimonio Inmaterial de la Humanidad-, la tonada, la misa asturiana de gaita o el traje regional de llanisca y porruano, además del baile del corri corri, que también acaba de ser reconocido. "Es para estar orgullosos de ello", destaca.
Son de las pocas mascaradas en España, si no la única, que lo han conseguido. No descartan en un futuro y en conjunto con la Red Ibérica de la Máscara, en la que se incluye Portugal, opten a ser Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Pero antes, después de que el pleno del Consejo de Patrimonio diera por finalizados los trámites para la declaración de BIC de los Sidros y Comedies el lunes, queda la aprobación del Consejo de Gobierno del Principado. En Valdesoto están encantados con la noticia y la celebran.
