En pleno 30.º aniversario, la Banda Gaites Candás ha renovado su junta directiva. Daniel García Vega (Luanco, 1994) es su nuevo presidente. Llega al cargo con el fuelle cargado de ilusión y respaldado por un equipo que aúna veteranía y juventud.
- Todavía no ha cumplido los 25 y se pone al frente de una institución que este año sopla 30 velas. ¿Impone?
-Por supuesto. Es el día de hoy que todavía sigo acojonado. Pero estoy rodeado de gente con mucha experiencia, como el primer presidente que tuvo la Banda, José Avelino Muñiz, o el anterior, José Manuel Fernández Rancaño, y eso me da mucha tranquilidad. Además, afronto este paso también como una deuda pendiente con Diego Alonso. Fue un miembro de la Banda de mi edad. Empezamos a la vez y siempre estuvimos juntos, hasta que lamentablemente falleció en 2015. Sé que si estuviese con nosotros ahora estaría a mi lado, en la directiva.
- Llegan con savia nueva. ¿Pretenden hacer muchos cambios?
-La idea es continuar con la misma línea que hasta ahora, pero con alguna pequeña variación. Queremos acercarnos más al pueblo. Uno de los proyectos que tenemos pensado es organizar un "Día del socio": Una jornada de abrirnos a la ciudadanía. Creemos que lo que nos falta es involucrarnos más en Candás, que es el pueblo que da nombre a la Banda.
- ¿Cree que la Banda de Música o la fanfarria "Pepe El Chelo" está más involucrada en la vida candasina que ustedes?
-Quizás sí, pero también es cierto que nosotros lo tenemos más complicado que ellos. No somos una formación que pueda entrar a un bar a tocar o parar en una esquina de la calle y hacerlo tranquilamente. Por la singularidad de nuestros instrumentos tenemos, por así decirlo, más rigideces en este sentido.
- ¿Cómo van de apoyos?
-Actualmente tenemos unos 100 socios. La mitad son colaboradores, que pagan una cuota anual, y la otra mitad son músicos, que abonan una mensualidad. Además, también contamos con ayuda del Ayuntamiento, que es muy importante para nosotros, y en momento puntuales también recibimos algún fondo del Principado.
- Uno de los retos que han de afrontar es la organización del festival de gaitas.
-Sí, estamos ultimando los últimos flecos. No podemos adelantar todavía muchos detalles del programa. Habrá cinco bandas. Nosotros, la bandina y tres grupos invitados: uno de Asturias, otro de Galicia y uno de la Bretaña francesa. También tenemos pensado traer algún cuarteto o quinteto que toque en algunos de los establecimientos colaboradores para dar más ambiente.
- ¿Tienen previsto organizar algo especial por el trigésimo cumpleaños?
-Algo queremos hacer, pero todavía no lo tenemos cerrado. Seguro que será a finales de este año y aquí en Candás. Otro de los proyectos que estamos estudiando es organizar también un viaje para toda la Banda. Ir a algún sitio que nos apetezca y buscar algún grupo o institución que nos facilite tocar allí.
- También están de casi estreno en su local de ensayo. ¿Cómo ha quedado el faro tras la reforma?
-Estamos muy contentos. Es un espacio muy amplio y ha quedado muy bien. ¿Que podríamos tener algo más céntrico? Desde luego, pero sabemos que eso es muy difícil. También es cierto que en invierno, con el frío y la lluvia, a veces se hace muy pesado ir hasta allí. Pero reconozco que lo que se disfruta ese espacio en verano y con el buen tiempo... Eso no lo cambio por nada. Un día de sol en el faro justifica todos los de lluvia.
- ¿Y de cantera? ¿Cómo van?
-No sobra. Podríamos decir que hay poca cantera, pero tenemos la suficiente como para garantizar el futuro de la banda.
