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Evacuan agua de la senda del Tranqueru para evitar nuevos argayos en Xivares

Los vecinos temen que de seguir las lluvias puedan provocarse nuevos desprendimientos - en la ladera cercana a la urbanización

Maquinaria, ayer, en la senda cerca del argayo; al fondo, Xivares. R. A. I.

El argayo que tuvo lugar en la jornada del sábado en la urbanización Playa de Xivares de Carreño y que sepultó parte del área deportiva ha necesitado de la rápida intervención del Ayuntamiento. En la jornada de ayer, los técnicos municipales acudieron a la zona y la maquinaria comenzó a trabajar, con el objetivo de evacuar agua de la zona de la senda del Tranqueru, la colina de la que se desplomó parte de la ladera.

Con esta intervención, se pretende que el argayo no siga cediendo, a la espera de los informes técnicos que apunten a una solución definitiva.

Todo comenzó cuando, a raíz de las constantes lluvias, varias toneladas de tierra y piedras se desprendieron de la ladera de la senda del Tranqueru sepultando las gradas de la zona deportiva de la urbanización. Además, tiraron abajo una valla, llegando hasta el centro del campo de balonmano.

El susto fue tremendo para los vecinos, que se mostraron muy preocupados por lo que pudiera acontecer. Según indicaban, otra buena parte de la colina permanece inclinada, por lo que consideraban que de seguir lloviendo acabaría por desprenderse.

Por suerte, la lluvia dio una tregua durante la mañana de ayer y la alcaldesa, Amelia Fernández, acudió con los técnicos del Consistorio para tomar las primeras medidas de urgencia. Éstas se orientaron a tratar de evitar que la colina inclinada continúe cediendo y acabe por sepultar por completo las instalaciones deportivas de la urbanización o incluso llegue a afectar a las viviendas.

Con este propósito, la pala de propiedad municipal comenzó a trabajar en la ejecución de zanjas que permitan evacuar las fuertes lluvias, que han asolado la zona durante las últimas semanas. Las zanjas deberían poder evitar que el agua procedente de la escorrentía siga llegando hasta la zona del argayo ya existente, haciendo mella en el terreno y agravando el problema. Mientras, se trabaja en los informes técnicos en los que se determinarán las posibles causas y actuaciones a seguir en los próximos días, en una zona en la que se vienen sucediendo situaciones similares en los últimos tiempos. La última, hace poco más de un mes.

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