El Ayuntamiento de Villaviciosa completó la digitalización de las actas de los plenos. A principios de la década pasada, pasaron a formato digital las sesiones de los años de 1617 a 1880, un trabajo que realizó un taller de empleo de la Mancomunidad Comarca de la Sidra. Ahora, encargaron el mismo cometido a la empresa Doc-it para que escanease hoja por hoja las actas de las sesiones plenarias celebradas entre 1881 y 2012. Y es que desde 2012 ya se digitalizan automáticamente desde el programa de gestión del Ayuntamiento.

El objetivo es que se puedan consultar en el archivo a través de internet, aunque ese paso de volcado de información a la red de redes aún no se ha realizado. Este sistema online de consultas hará que los investigadores y otros interesados en consultar actas de plenos antiguas no tengan que hacerlo sobre el documento original lo que, obviamente, provoca que se deterioren sus hojas con el paso del tiempo.

Otros de los documentos ya digitalizados por el Ayuntamiento maliayés son las actas de la comisión municipal permanente, que existió desde 1924 hasta 1983. En este caso, empezaron la labor, que esperan poder completar cuanto antes.

El alcalde, Alejandro Vega, avanzó que en los presupuestos municipales se incluirá una partida destinada exclusivamente al archivo. "El año pasado fue el primero en el que se dotó de dinero al servicio, con 6.000 euros. Este año aún no está decidida la cantidad", señala.

La archivera municipal, por su parte, considera más que positivo el hecho de poder contar con dinero para realizar tareas tales como seguir digitalizando documentos y restaurar los que estén en malas condiciones.

Una de las joyas del archivo histórico de Villaviciosa se encuentra en mal estado debido al paso del tiempo y a que no se actuó sobre ella. Se trata del padrón de 1578, el más antiguo que se conserva. Un documento donde figuran como habitantes solo los hidalgos y los hijos varones de éstos.

El contenido de este libro fue transcrito por Antoine Massin, un vecino de Villaviciosa que se afanó por descifrar los trazos que conforman este antiguo padrón para elaborar un cuaderno que él mismo explica que "es fruto de un trabajo personal y la inversión necesaria para su realización es a cuenta propia".

El archivo histórico de Villaviciosa atesora otros documentos dignos de renombre. Hay escritos donde figuran alistamientos de soldados desde 1738; así como el registro civil desde 1836 hasta 1870, entre otros documentos.

En total, el archivo histórico maliayés está conformado por 1.929 libros y 1.302 cajas, repartidos entre diferentes estancia de la Casa Consistorial y el Centro Cultural San José de Capistrano.