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El alcalde de Siero, sobre la denuncia del SIPLA: "No quería ofender a la mafia"

El sindicato mayoritario en el cuerpo pide 12.000 euros a Ángel García por compararlo con el hampa y asegurar que recibió amenazas de este

El alcalde de Siero, el socialista Ángel García, ha respondido con ironía tras conocer la nueva denuncia que ha interpuesto el sindicato de la Policía Local SIPLA contra él -adelantada por LA NUEVA ESPAÑA- por llamarles en medios de comunicación "mafia" y asegurar que había recibido amenazas de su parte. "No quería ofender a la mafia comparándola con la policía", espetó ayer García, que lleva varios meses enfrentado al sindicato mayoritario de la policía en Siero a cuenta de la reorganización del cuerpo. "Esperaba más bien una denuncia por parte de la mafia que de la policía", añadió.

El sindicato ha convocado al Alcalde a una conciliación. Para no llegar a juicio, solicitan que el regidor rectifique las declaraciones en las que les acusaba de ser un "lobby de presión", "una mafia" y en las que aseguraba haber recibido amenazas de su parte. Además de desmentir estas afirmaciones, se le solicita una indemnización de 12.000 euros por los supuestos daños y perjuicios a los agentes.

Es el segundo capitulo judicial dentro de la guerra abierta entre el Alcalde y los policías del sindicato. La primera denuncia contra García llegó a las pocas semanas de iniciarse el conflicto, asegurando que este había incurrido en amenazas, coacciones, o prevaricación entre otros delitos.

La denuncia fue archivada por el Juzgado de Pola de Siero y la Audiencia Provincial está en trámite de estudiar el recurso interpuesto por el sindicato. Ahora hay que sumar esta segunda querella, que comenzará con un acto de conciliación. Esta denuncia abre aun más la brecha entre la facción mayoritaria de los agentes y el gobierno municipal. Las negociaciones para encauzar la relación están en punto muerto.

Los representantes sindicales se levantaron de la mesa en el último encuentro y, además, tras pactar con el edil de Seguridad Ciudadana un alto en su enfrentamiento público, optaron por querellarse de nuevo contra el regidor.

El SIPLA lleva años intentando negociar algunas mejoras para la plantilla, con un aumento de agentes, una nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT), un cuadrante con coeficientes correctores por hacer turnos o mejoras en las instalaciones. Sin embargo, el gobierno local no parece compartir la mayor parte de las reivindicaciones del sindicato y no está dispuesto a ceder en casi ninguna.

Además de las peticiones en materia laboral, en el conflicto subyace el enfrentamiento con la otra facción de agentes del centro (afiliados al CSIF), a los que no quieren dejar el control del cuerpo, como sucede actualmente.

Algo que se les está complicando, pues hoy concluía el concurso para nombrar a tres nuevos subinspectores. Esto implicará que en los grupos de trabajo coincida más de uno y los que pertenecen a la primera fila del SIPLA puedan perder el mando.

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