"No hay ningún sitio donde se pueda encontrar junta una documentación así, centrada en el oso pardo". Javier Naves, biólogo de la Estación de Doñana y experto en la especie, resume así el Centro de Documentación que inauguró ayer la Fundación Oso de Asturias (FOA) en su sede de Proaza, con 851 referencias sobre oso pardo que abarcan desde la biología a la antropología. Un fondo documental dirigido sobre todo a la comunidad científica, pero del que pueden disfrutar todas las personas interesadas en los plantígrados, accesible también desde internet.

El centro documental es una joya para el estudio de la especie, pues cuenta con libros muy difíciles de encontrar, como una selección de títulos de la Unión Soviética traducidos al inglés, así como otros sobre las primeras investigaciones en torno a los osos realizadas en Norteamérica. "Hasta ahora nos habíamos centrado en el cuidado de los osos que no se pueden reintroducir en la naturaleza, la educación ambiental y la preservación del hábitat osero. Ahora damos un paso más y ponemos toda la documentación del oso pardo cantábrico a disposición de investigadores, científicos y quien se quiera acercar con ánimo divulgador", resume Nicanor Fernández, presidente de FOA.

Un centro documental con el que la Fundación ha soñado durante años, desde la idea primigenia que tuvo el economista Pedro Rodríguez Inciarte hasta hoy. "Ha sido una suma de esfuerzos", remarca Fernández, que ha salido finalmente adelante con el apoyo económico de Arcelor-Mittal, patrono de FOA desde su fundación. "Estamos comprometidos con esta iniciativa desde sus inicios, es un proyecto muy interesante, una referencia internacional", apunta Margarita Álvarez, responsable de Medio Ambiente de la compañía.

Desde ayer, el centro está abierto al público en la Casa del Oso de Proaza, así como en la página web de FOA, con una herramienta de búsqueda, fotos, vídeos y una sección de rastros, huellas y señales del oso pardo. "Va a ser un referente en la formación científica específica sobre el oso pardo, es algo más que una biblioteca", comenta Patricio Arias, de "Doc-It", la empresa que organizó el fondo documental.

A partir de ahora, el estudio científico sobre el oso pardo cantábrico se concentra en su casa, en Asturias.