La crisis del coronavirus ha aumentado la producción de envases de plástico para el sector de la alimentación en la fábrica Linpac Packaging asentada en Quintana (Pravia). Un auge de la demanda de envases para el almacenamiento de alimentos que ha generado también cambios en la línea de producción pasando de los envases destinados a pastelerías a aquellos previstos para conservar carne y pescado. "Hemos aumentado la producción porque somos parte de la cadena alimentaria, que está a pie de batalla, y necesitan nuestro producto pero hemos cambiado de línea porque hay mayor demanda para productos de primera necesidad", explica María Menéndez Urbón, directora de Recursos Humanos de la empresa.
Un cambio en la fabricación de bandejas de plástico que ha servido para mantener el cien por cien de los empleos de la factoría, alrededor de 450 personas. "Estamos muy orgullosos, son los importantes y están trabajando de forma excepcional, además, el comité de empresa nos está ayudando muchísimo, están involucrados y estamos en contacto permanente", detalla. Mientras tanto, los servicios de personal, administración o comercial, entre otros, están bajo las condiciones del teletrabajo y sólo se mantiene en la planta de Quintana un administrativo, un informático y Menéndez al frente de Recursos Humanos.
Además, señala que la empresa, dependiente del grupo Klöckner Pentaplast, sigue a rajatabla las recomendaciones de seguridad y se han estipulado medidas como el cierre de vestuarios y duchas, cambios de turno con desinfección de superficies, uso de mascarillas para los trabajadores que tienen mayor movilidad o la limitación de dos personas en el área de fumadores y de hasta un máximo de cuatro, en la cocina, siempre con distancia de seguridad. La empresa espera llegar a todos los pedidos para asegurar la cadena alimentaria en España.
